Silva bajito

Con un hombre menos en gran parte del partido (expulsado Somoza a los 37’ PT), derrotamos en la Bombonera a Arsenal de Sarandí por 2-0 (Ledesma a los 4’ ST y Sánchez Miño a los 43’ ST) y de esta manera quedamos muy cerca de acceder a la siguiente fase de la Copa Libertadores.

Sin lugar a dudas, lo que más debemos destacar del equipo es la entrega y la actitud ganadora a lo largo de los 90 minutos.

A pesar de que aún restan dos fechas para que se cierre el Grupo 4, el cotejo ante los del Viaducto era fundamental, ya que llegamos al mismo en la segunda colocación, con solo un punto más que el rival de turno.

El duelo arrancó bastante parejo, ya que ninguno de los equipos podía llegar al arco con claridad, sin embargo, nosotros teníamos más posesión del balón.

Cuando todo se desarrollaba con normalidad, se nos complicó el partido en un abrir y cerrar de ojos, debido a que sorpresivamente nos quedamos con uno menos, por la expulsión de Leandro Samoza por doble amarilla.

Sin lugar a dudas, esa incidencia cayó como un balde de agua fría en la Bombonera, e indudablemente muchos pensaron que con tanto tiempo por delante, se podía venir lo peor.

Para mal de males, el empate no era negocio, porque nos obligaba a ganar los últimos dos duelos (uno de ellos contra el líder Fluminense, en Brasil), para no depender de otros resultados.

Por suerte, en el inicio del complemento (4’) logramos abrir el marcador tras una asistencia magnífica (con el taco) de Santiago Silva para Juan Román Riquelme, quien quedó mano a mano con el arquero, el cual le desvió el disparo y Pablo Ledesma de arremetida logró introducir el balón cuando un defensor intentaba despejarlo.

Ese tanto agrandó a nuestros muchachos y a la hinchada, que con el aliento ensordecedor contagió al equipo para que no se sintiera el hombre de menos. Podemos decir tranquilamente, que gracias al apoyo incondicional de la gente, estuvimos “11 contra 11”.

Con la ventaja en el marcador, pudimos manejar el encuentro a nuestro antojo, no nos hizo falta meternos atrás para conservar el 1-0.

Cuando el partido se moría (43’) y el resultado ya era un negoción, llegó el tanto tranquilizador, nuevamente Silva se disfrazó de asistidor y dejó solo a Sánchez Miño, quien definió muy bien ante la salida del arquero, para decretar el definitivo 2-0.

Ahora el pase a la siguiente fase está muy cerca de concretarse, debido a que le sacamos cuatro puntos a Arsenal de Sarandí (está 3º), a falta de dos compromisos para el cierre del Grupo.

Tal es la tranquilidad que tenemos en estos momentos, que hasta nos podemos dar el lujo de perder en Brasil ante el puntero Fluminense (miércoles 11/04), porque cerraremos la zona contra el débil Zamora de Venezuela (miércoles 18/0, en la Bombonera), equipo que seguramente llegará a esa instancia sin chances de nada.